Si los Llaldar son las reglas mas complejas el caos es la mas simple de todas desde que se distingue lo simple de lo complejo. La regla del caos afirma que ninguna situación puede prolongarse indefinidamente.
Instantes después la regla del caos establece que cada instante habrá una regla del caos diferente. La idea es siempre constante pero su expresión permanece mutable. Sucede que la propia regla del caos implica que en ocasiones no existe tal regla para que existan dos un momento mas tarde.
También como consecuencia de su carácter voluble la regla del caos no posee un único nombre, no uno que la defina completamente. La gran nominación Llaldar la nombró Herdel pero también es llamada Kaos, Flujo, Encrucijada o la bestia de los apéndices infinitos.
A diferencia de los Llaldar la regla del caos no es consciente, no la mayor parte del tiempo. Sin embargo suele poseer la capacidad de cambiarse a si misma. Es la única regla que puede poseerla.
Hergal es ademas de la regla automutable la única a la que le está permitido violar todas las demás reglas. Esta capacidad se deriva de su carácter cambiante, ya que en sus cambios puede volverse una excepción a cualquier regla.
La regla del caos por ejemplo puede crear un Llaldar sin el conocimiento o aprobación del resto de ellos. Y los Llaldar que crea pueden opinar cualquier cosa por disparatada que pudiera parecer.
Algo parecido ocurrió en la hora 372428 cuando Hargul se volvió un Llaldar empatando así la votación sobre si debían crearse o no reglas con posición y apariencia, que tuvieran una expresión material en lugar de existencial.
Haldu votó en contra de esa propuesta. Sin embargo votó a favor de crear un nuevo Llaldar que rompiese el empate y que estuviese a favor de las realidades materiales.
Poco después Jaldú dejó de ser un Llaldar y estos volvieron a ser pares. Pero en aquella ocasión fue durante pocas horas...
